UNVIAJE.
Cada poema es un viaje
de final desconocido,
el equipaje es la pluma
y una idea con fortuna
para empezar el camino.
Una estrofa sigue a otra estrofa,
un verso sigue a otro verso,
y van haciendo un tejido
de final desconocido,
como un pequeño universo.
Sabes que quieres decir
pero no como decirlo,
al mismo tiempo que escribes
lo pares y lo concibes
y vuelves a concebirlo.
puedes ir al infinito,
sin acabar el camino,
el poema no concluye
el final sólo se intuye
o se acaba el pergamino.
El tema es inagotable
como espacio sideral,
cuanto más hablas del tema
se hace más amplio el poema
y puedes ampliarlo más.
En vuelto en este
misterio
me encuentro en cada poema,
sólo un verso primitivo
desencadena el motivo
¡y gira en torno de un tema!
Rafael Campillo
Valenzuela.
Montgat, 27-3-2004.
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