VENDAVAL:
En medio de vendaval se oían voces
lejanas,
difuminadas del tiempo venían de
otras galaxias,
eran voces ancestrales atroces y
desgarradas,
eran las voces de hombres, que
amargamente lloraban.
Eran voces de dolor, de hombres
sin patria y sin casa,
eran voces de lamento de los
miedos sin palabras.
Eran voces de los hombres que
rompen sus alianzas,
que se sienten muy culpables de
hechos y malandanzas.
En medio de la tormenta, las voces
más se acercaban,
en una noche sin luna negra de
negrura amarga.
Voces de todos los tiempos con el
viento iban mezcladas,
eran voces y lamentos, eran
hombres que lloraban.
Eran voces de lo hombres que
habían roto la alianza,
y se sentían culpables de daños y
malandanzas,
Eran los hombres culpables, de las
oscuras desgracias,
los que propician miserias, con
guerra y sin guerra matan.
Los espíritus errantes eran almas
condenadas,
fueron almas egoístas, que en
fondo fueron malas.
que olvidaron que la muerte, llega
tardía o temprana,
que olvidaron que el dinero, ¡no
lo ponen en la caja!
Rafael de Granada.
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