LOS JÓVENES,
LAS JÓVENES.
Reconozco la verdad:
los jóvenes se preparan
desde que nacen y encaran
la vida desde su ambiente;
hemos de ser muy concientes
¡de esta gran realidad!
porque un hombre preparado,
una mujer preparada,
tiene más fácil entrada
en el mundo laboral,
y en la vida en general
estarán más valorados.
No se trata de agobiarlos,
sólo hay que estar a su lado,
apoyarlos sin enfados,
estar por ellos atentos,
que en su vida estén contentos,
en el fondo, ¡sólo amarlos!
Sólo poner en sus manos
los medios más necesarios,
a veces hay que ayudarlos,
o hay que estimular sus mentes,
darles un feliz presente
¡con nuestros medios humanos!
Ellos no tienen riqueza,
no tienen muchas defensas,
viven de nuestras despensas,
hemos de vivir pendientes
y de ser siempre concientes
¡que sólo tienen belleza!
Rafael de Granada.
No hay comentarios:
Publicar un comentario